29.1.08

San telmo

Se turnaban en el acecho y el objetivo de cada uno, no era tan diferente. Se acercaban lentamente y los ojos extremadamente abiertos delataban los roles que habían asumido para mi y para ellos.Cada vez eran mas ,y yo ,me sentía cada vez menos, en el medio de un plan ajeno puesto ahí , como llegan las gacelas a involucrarse en el destino de una manada de leones .Fingí distensión y mi maniobra distractiva se acopló perfectamente en lo previsible para ellos pues solo contaban con cada movimiento de los míos. Pasaban los minutos y ya no me parecía tan grave que me despojaran con esa pasión, de quien pide misericordia, apenas de dos cigarrillos.
Pero che!!!